En este día que me
decidí a escribir en este apartado del ciberespacio recordé varias
cuestiones. ¿Cuántos blogs he tenido? ¿qué no he comentado? ¿qué
dije? ¿miré algo? ¿porqué puse esos post?
Hace ya algunos años me
he dedicado a resaltar asuntos personales parafraseando, entrando en
polémica o poniéndolo tal cuál, real y poco imaginario.
Entre mis distintas
vivencias metáforas me han encantado y sin querer me he involucrado
en una serie de desvaríos. Inspiración rotunda y práctica de
solitario más al final resalto algo: pasión.
Sin querer este asunto de
volverme poeta en unos cuantos minutos, ha pasado de ser un hobbie a
un instante de trillar memoria. Natural y circunstancial resulta meditar
y luego quedarse suspirando.
Quisiera decir que eso no
es así, muchas veces traigo inquieta la cabeza hasta que empiezo
a pensar ¿qué escribiré ahora? Es la primera vez que reconozco ¡no
sé ni que digo! jajaj




