Hay ocasiones que mi libertad, parece cosa obsoleta, me involucro en hipótesis y falsos razonamientos, los cuáles me agobian, me hacen sentir adversa y en cierto modo, no cerca de nada, ni de nadie.
Entre mis reflexiones, Dios sigue haciendo su parte y yo la mía, pero sin querer quisiera seguir volando, encontrar algo que en verdad llenara aún más esa parte de mi yo soñador.
A veces considero, algunas cuestiones alocadas como irnos juntos, solos y tomar decisiones sin pensar tanto, esquivar miedos, cruzar fronteras y simplemente dar, dar, amar, ser, estar.
Entre mis sueños se encuentran una variedad de complementos, aquellos que llenarían mi ser y mis ecos introspectivos, sólo quisiera alguien me tomara de su mano y no pensara sólo quisiera, sólo fuera más como yo, alguien poco futurista y simplemente momentáneo.
Existe una brecha entre mis sueños y la profundidad de tu caricia, eso se llama presente, eso se llama que el tiempo se me está escapando de las manos y sigue todo tal cuál siempre, no pasa algo más.
Necesito enamorarme más y más, quiero sólo desvanecerme y estremecerme, quiero sentir, quiero desear, procuro entonces otro tiempo más, para meditar en esos besos, para conocer esas manos y desbordarme de fe en la espera de tu reflexión.
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