jueves, 4 de febrero de 2016
La bendición EL BEBÉ
El ser madre es la realización de una mujer, es la profundidad que carcome cada una de las emociones y al mismo tiempo las exhalta, llenándola de vida, dándola a conocer como la mujer que jamás imaginó ser.
Caricias, llantos, alegrías, desesperación y somnolencia son algunas de las cuestiones que ocurren en la cotidianeidad, a veces los días parecen llenos de una sola de estas circunstancias, pero al finalizar la jornada nos damos cuenta de cuán inmersos estamos en cada una de ellas.
'Agú', palabra tan típica del bebé, acompañado de un gesto en su rostro es lo mejor que puede pasarle a una persona para sentirse tan especial, dichosa y llena de deseos por permanecer un momento más y agrandar esa sensación.
No bastan palabras para expresar la alegría de ser madre y sin duda, la bendición de compartir a tu bebé con otras personas, para extender el gozo a todo espacio, ya que su simple presencia llena de felicidad a quien le acompañe.
martes, 2 de febrero de 2016
rEnAcEr
A casi dos años de no publicar nada en este espacio, decidí en este día volver a abrir parte de mi intimidad, mi todo, mis letras. En este reencuentro conmigo misma, fijé mi mente en todo lo que he vivido en este tiempo, cambiaron mis hábitos, carácter y en escasas palabras yo misma.
Casarse, tener un hijo, no trabajar, son algunas de las eventualidades, sin dudarlo las mejores de mi vida. He aquí que está a la puerta lo que pedí en mis pensamientos, ahora sólo me lleno de emociones y en ratos llanto, cuando parece que la vida me trajo a un camino que no imaginé existiera.
Hay historias que pueden contarse y creer que se saben, pero es hasta que lo vivimos, que en realidad entendemos, aquello que nos invade la sangre, evapora nuestros nervios y enchina la piel de nuestra mente: la libertad de vivir.
Si en verdad deseara algo más que este momento, solicitaría una taza de café espumoso y un pay de fresas, entre el ocio y un poco de música relajante quizá logre recapacitar el porque de mis temores y el de mi valor a la par, todo es un juego de deletreos, todo es un momento que pasará, sólo reconozco que mi renacimiento vale porque ÉL me compró.
A Dios bendigo en este tiempo, sólo ÉL me sostiene y en este tiempo de reflexión, me llena de gozo saber que me levantó.
Casarse, tener un hijo, no trabajar, son algunas de las eventualidades, sin dudarlo las mejores de mi vida. He aquí que está a la puerta lo que pedí en mis pensamientos, ahora sólo me lleno de emociones y en ratos llanto, cuando parece que la vida me trajo a un camino que no imaginé existiera.
Hay historias que pueden contarse y creer que se saben, pero es hasta que lo vivimos, que en realidad entendemos, aquello que nos invade la sangre, evapora nuestros nervios y enchina la piel de nuestra mente: la libertad de vivir.
Si en verdad deseara algo más que este momento, solicitaría una taza de café espumoso y un pay de fresas, entre el ocio y un poco de música relajante quizá logre recapacitar el porque de mis temores y el de mi valor a la par, todo es un juego de deletreos, todo es un momento que pasará, sólo reconozco que mi renacimiento vale porque ÉL me compró.
A Dios bendigo en este tiempo, sólo ÉL me sostiene y en este tiempo de reflexión, me llena de gozo saber que me levantó.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)





