jueves, 23 de julio de 2009

Parte I Un recuerdo

Seguir escuchando esa música de reggae francés, dentro del carro Cuttlas, paseando por el Eje Central, tráfico de toda clase, rutina, convergencia de puntos que ocasionalmente se entrelazaron.

Esos dados que cuelgan de tu espejo central, ese que pegaste con Kola-loca, ese que tumbe por tercera vez en estos dos meses, otro fin de semana, manejas y a tu lado voy, no paro de hablar sobre mi crisis existencial en la no resolución de mis problemas ex amorosos; tú únicamente escuchas, sonríes, me miras, cierras la boca y te imaginas ¿a dónde vamos, qué haremos?

Propongo ir a Zona Rosa, pienso hoy Vodka o un Tequila, al final de cuentas acabamos con una de Malibú. ¿Buscas un OXXO? ¡Te estacionaste en zona de mariachis! Rayos, otro momento más y me lleva la patrulla, córrele un hotel en la Doctores nos espera.

Dichoso curso en Ibero del DF, supuestos, realidad estamos en el hotelito con el Malibú, te apuras a prepararnos, no más me miras, piensas y no haces, provocas, me tentas; miro por todas partes, buena idea prende la tele, ¡ups no hay nada! Que hacemos, tómale más al vaso, ponle más jugo, otro más, órale ahí vamos, ¿las estás contando?

Ya pasan de las 12 de la noche, nos queda un cuarto de la botella, te animaste a decirme ¿nos dormimos? Entonces botamos los vasos por ahí, me encimo en las cobijas, tú si que te tapas, yo si que no pienso apagar la luz, o bueno ¡sí! Deja ahora prendida la del baño.

Te acercas, ¿te abrazo? ¡Bueno! Aproximas la cabeza, rozo la nariz, entre veo tus ojos, cuando yo misma sólo veo que casi me besas, ¡mejor acomódate! ¿Cómo vine a parar aquí?

No hay comentarios:

Publicar un comentario