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Saber que no se ha ido el sentimiento, que trasciende, nos envuelve, es nuestro, hoy sentí tu rostro en el mío, la inquietud de nuestros cuerpos, los versos flotando en la piel, reflejados por destellos de erotismo; sin querer permanecí quieta, sabiendo eras mío, te pertenezco y me perteneces, Dios elevó mi sensación de miel con canela, la cuál conocí en tu plenitud, en tus labios sabor cereza.
Floté en la ingenuidad, te di mi pasión, mi fuga, mi corporeidad, te llevaste mi espíritu, mi mente, mi renovación, esa constante que me llenaba y que aún me hace sentirme serena, fugaz, coqueta; hay motivos, por los cuáles seguir queriendo elevarme en tus manos, hay ocasiones, en que deseo toques mi ser, te envuelvas, permanezcas en mi besos, en mis deseos.
Hoy como ayer, como siempre, permanecí reflejada en tu aliento, me suspendí padeciendo otro encuentro con tu recuerdo, con la transparencia de tus ojos, con la sed que me renovó y me destruyó al mismo tiempo; quiero más de ti, quiero otro goce, exaltárnos juntos, vivir, volar, ceder, existir, quiero, quiero, quiero, amor Amarte SER.
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