Genial

Experiencia simple y remota, participar de lo Divino, estar cautivo en la quietud, saber eres parte de un eje, que se mueve, pero que sólo lo condicionan cuestiones éticas y personales; sin embargo, luego te fugas existes, convives, dejas paso a tus huelllas, proclamas y saboreas esa condición de ser social.

Cada que amanezco una gran cantidad de luz entra por mi ventana, pero no puedo estar más agradecida que por abrir los ojos, que por saber que me comeré las letras del aire, de la naturaleza, de las personas; que conviviré con una gran cantidad de universos simbólicos, que se aplican a mi rutina.

Sé que lo existente es tan temporal, pero reside y simplemente puedo gozarme en ello, cada que piso otro momento más esta tierra, reconozco que estamos hechos para grandes cosas; nuestra finalidad última reside en el amor, en ello es lo que convergen todos los puntos simbólicos y físicos, AMAR y ser AMADOS, gozarnos de ese permanecer en este espacio mundando, siendo elementos divinos.